La abdominoplastia es la cirugía que corrige el exceso de piel y grasa del abdomen y corrige la musculatura abdominal.
Consiste en la intervención del abdomen realizando una incisión suprapúbica extendida, de lado a lado del abdomen, con la que se elimina el faldón abdominal y se suturan los músculos rectos abdominales (plicatura de rectos y de oblícuos, si fueran necesario) y a la que se le puede combinar la liposucción láser para eliminar el exceso de grasa y moldear aún más la cintura.
Normalmente hablamos más de LIPOABDOMINOPLASTIA ya que en la misma intervención se acostumbra a combinar las dos técnicas (liposucción más abdominoplastia) para obtener un mejor resultado. También en algunos casos se puede combinar con la MARCACIÓN ABDOMINAL para darle mejor forma y la aplicación de LIPOLÁSER para producir un mejor efecto tensado de la piel.
Es una intervención que requiere un mes aproximado de recuperación evitando hacer esfuerzos para que la cicatrización sea correcta, si bien a los 15 días se puede hacer más o menos vida normal y tranquila. Requiere también llevar una faja compresiva alrededor de dos meses y realizar masajes postoperatorios o maquinaria estética específica para reducir la inflamación y acelerar el proceso de recuperación.
En numerosas ocasiones se combina la abdominoplastia con liposucción de espalda y flancos para obtener una mejor silueta y el aumento de glúteos con grasa propia aprovechando la grasa que se extrae de abdomen o flancos para injertarla en glúteos y obtener aún una silueta mejor.
La abdominoplastia está indicada en mujeres que hayan tenido embarazos y se haya producido una debilidad de la musculatura abdominal y un excedente de piel, en personas que hayan perdido gran cantidad de peso y les quede piel sobrante y en personas que quieran mejorar su silueta y deseen estilizar su cuerpo eliminando grasa y piel que les incomoda estéticamente.